lunes, 24 de agosto de 2009

Manchas I

NOTA PREPARÉNTESIS: ME FUI A METER A CONTROL CANINO MUNICIPAL A CONOCER QUE EL DIRECTOR ES UN AMOR Y SALIR CON LA FIRME CONVICCIÓN SOBRE LA ADOPCIÓN DE ANIMALES. LO VALE!!!

Me mira y se tira al piso patas para arriba, ya se, quiere que le sobe la panza, apenas lleva un mes conmigo y ya me tiene bien educada.

Su nombre: Manchas, dicen los que saben que es cruza de labrador con pastor alemán, tiene un blanco precioso que ensucia fácilmente y solamente se le ven las manchas cafés del lomo cuando está recién bañada. Está un poco bizca, saca la lengua cuando se siente feliz, le gustan los niños pero no le cae muy bien el velador.

Llegó una tarde a la cuadra de mi casa con hambre. Como aquí viven algunos amantes de los perros, cada un@ la adoptó con comida. Se ganó su lugar fácilmente cuando nos dimos cuenta que entendía las órdenes y además no era sucia. Seguro se había quedado sin hogar poco tiempo antes. Su hocico chimuelo nos causó ternura a l@s vecin@s y decidieron ponerle una casa al final de la cerrada. Poco a poco entró a mi casa, primero de vez en cuando y luego para resguardarse cuando le dieron una patada. Después debió tener cuidados especiales cuando se lastimó al cortarse con un vidrio al rascar la tierra y más tarde cuando fue esterilizada.

Contrario a lo que siempre he dicho, tener a esta perra ha sido una experiencia bastante interesante, no solo porque sus cariños me resultan divertidos, sino porque estoy aprendiendo a preocuparme por cosas más importantes que la filosofía social.

Adoptar un perro o un gato es toda una responsabilidad, no es solo jugar a jalarles una cuerda, hacerles cariñitos de vez en cuando para después olvidarlos en la calle. Es tener alguien con certeza de cariño y agradecimiento mutuo: el dueño agradecido por la compañía, por la cola que se mueve cada vez que nos ven llegar a casa, por los pantalones mordisqueados ; la mascota agradecida por la comida, por los cuidados diarios, por ser parte de la familia.

En Morelia existe un perro en la calle por cada 7 habitantes. Según el Director de Control Canino, Ezequiel Chávez Sánchez, ha disminuido considerablemente este número “imagínese, antes había 1 por cada 5” me dice, orgulloso de la labor que ha hecho estos años.

Llegar a lo que comúnmente se conoce como perrera municipal no me fue tan difícil como yo pensaba. Ahora estoy convencida que una de las cosas buenas de la vida que todo ser humano debe vivir, es la adopción de mascotas (aún cuando no les gusten, cambiarán de parecer cuando lo hagan). Así que planeando hacer parte a toda mi gente, me adentro en el tema para lo cual me asesoré con expertos.

Cuando un animal es levantado de la calle, los dueños tienen hasta 3 días para recogerlo. Si nadie lo reclama, se evalúa su temperamento, edad, raza, talla y estado de salud para ponerlo a disposición para ser adoptado. Por supuesto, hay de todo tipo de perros o gatos. Los interesados presentan copia de su identificación, comprobante de domicilio y firman un convenio donde se comprometen a cumplir los requerimientos de la mascota: espacio, atención, asistencia médica, alimentación, tiempo y cuanto necesite. El animal se entrega con la vacuna antirrábica, desparasitada y esterilizada. Lo cual representa muchas ventajas, la mejor de ellas es disminuir la sobrepoblación de animales en la calle, pero también aumenta la longevididas, disminuye el temperamento, la territorialidad, y un poco del estrés que los hace saltar, correr y alocarse hasta destruir la casa completa. Por lo tanto es más fácil educarlos.

En un principio estaba un tanto escéptica es tener a la Manchas. Rasca la tierra, le gusta brincarle a la gente, tira mucho pelo, ronca en el día, ladra en las noches e invadió mi estudio como su lugar favorito de la casa. Al final ¿qué más da? No es muy brillante, pero es muy amorosa…

Puntos suspensivos: Anímese, adopte un animalito: Av. Alamo 365 Fracc. Alamos (encárguese de llegar a la secundaria técnica 65 y los letreros lo llevarán hasta Control Canino) o llame teléfono 321 47 31

3 comentarios:

Rogelio Segovia dijo...

mmmhhh! creo que morelia es algo lejos para ir por un perro

aparte ya tengo una!!!!!!

Pink dijo...

AAAAAAAAAAAYYYYYYYYYYY niña tóxica ya me andas intoxicando con lo de adoptar una mascota pero... pero... es que sufro mucho cuando se mueren...

La Catarina dijo...

Simbad: no te preocupes en donde vivas, seguro habrá una perrera municipal donde puedas adoptar otra o un gatito...

Pink: la muerte es inevitable, pero valdrán los momentos vividos...