jueves, 8 de octubre de 2009

Octubre

No se si sea el hecho de que es Octubre y siempre duele, o mi impotencia ante el terror de mi hermano, o la desesperación por el dolor de espalda, o las nauseas que me provocaron los mensajes de bienvenida nuevamente al mundo, quizá me siento triste porque hoy no abrimos el negocio ya que la lluvia amenazaba con tirarnos nuestro techo improvisado (lo que implica pérdidas y cinco litros de salsas descompuestas), o porque tengo miedo de recibir otra llamada de despedida como la del año pasado, o porque acabo de hablar con la chilangaza familia y extrañarlas también duele, o porque no me siento la misma, o porque me pregunto lo mismo...

O tal vez no he superado todos los octubres y hoy se me quedaron atorados en la garganta...

1 comentario:

Karla dijo...

lo bueno es que ya casi termina!
animo!!