A Karla en el cuarto de siglo...
Intenta hacer yoga cada mañana para alinear sus chacras, su figura y el temperamento (el último, el más difícil). Utiliza el pelo chino porque le encanta que tod@s le digan lo bien que le sienta, es parte de su naturaleza de viento. Es lo suficientemente obsesiva para perdonar, lo suficientemente cariñosa para mandarnos a la cama con un beso. Tan crujiente como sus palabras.
Anda de un lado para otro cantando porque es hiperativa. De vez en cuando se detiene a arreglarse sus audífonos mientras piensa cómo hacer una vez más para evitar las peleas con las hermanas. Adora a su madre y su padre, pero no los entiende, ni viceversa. Como todos, sufre de errores de comunicación.
Lo peor que tiene es esa hipersensibilidad. El mundo le duele cuando hace frío, más le provoca sonrisas el tibio arropo de la tarde. Se protege de espadas desenvainadas, de regaños sin fundamento y sobre todo, odia aburrirse.
Le gusta el negro, el rock y las miradas misteriosas. Ella los prefiere rebeldes, para cocinarles y chiquearlos. Sueña con un mejor trabajo, un amante apasionado, la comprensión de su familia, sobre todo, tener un espacio propio.
Cada día reta a la imagen en el espejo, cuando da la última mirada para checar si todo combina se pregunta...
2 comentarios:
Persona interesante esta "galleta", seguro que como tú. Veo que tomaste la iniciativa, yo también te agrego a mi lista :)
Me voy volviendo alimaña frecuente de esta Grieta, ja!
Un saludo casi patrio.
Magnifico!!
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